23 Dic Cómo la inteligencia emocional puede impactar tu estrategia de marketing
Cuando piensas en inteligencia emocional en marketing, ¿qué es lo primero que te viene a la mente? Muchos dueños de empresas y especialistas en marketing consideran que es uno de los factores más críticos que impulsan las ventas y las conversiones.
¿Por qué?
En pocas palabras, la inteligencia emocional permite a las personas acceder a sus audiencias y ofrecer contenido y marca coherentes. En la mayoría de los casos, los especialistas en marketing piensan que usar la inteligencia emocional significa provocar una respuesta emocional o abordar un punto crítico de dolor. Va más allá de eso.
Tener dominio de tu inteligencia emocional como especialista de marketing se traduce a:
- prestar atención al tono de tu marca
- el comportamiento en la interacción de tu audiencia con tu negocio
- mejoría de la escucha social o social listening
- ofrecer una imagen de marca nítida acorde a la reputación que quieres construir
- construir una buena relación con tus consumidores
- aprender de tus errores (somos humanos después de todo)
Implementar nuestras estrategias de marketing desde la inteligencia emocional no es nada nuevo, no obstante, la forma en que exploramos y hacemos crecer nuestros negocios ha cambiado drásticamente, en especial con el rápido crecimiento del comercio electrónico.
Y hablando de comercio electrónico, así es cómo la Economía Naranja y el comercio digital se unen
Es de suma importancia que, como estratega de marketing, tengas en cuenta estos cambios en el abordaje de tu plan de acción desde la inteligencia emocional, utilizando los avances para potenciar al máximo tu estrategia y alcanzar tus objetivos.
¿Sabías que los especialistas que utilizan la inteligencia emocional para desarrollar campañas exitosas comparten tres elementos? Estos son:
- Son honestos sobre sus motivaciones al hacer marketing
- Empatizan profundamente con su publico
- Cierran la brecha entre sus objetivos y lo que su audiencia quiere
Cada día surgen nuevas actualizaciones a nivel de herramientas digitales para optimizar nuestras campañas y contenidos orgánicos, por lo que, mientras más técnico se convierte el marketing, más humano debe ser por igual. Cuando todos estamos utilizando las mismas herramientas, aplicar la inteligencia emocional se convierte en una ventaja para nosotros.
La respuesta es sencilla: las personas toman decisiones basadas en emociones. Se dice nuestro cerebro se divide en tres partes, acorde a Paul MacLean. El cerebro reptiliano, donde se dan las conductas impulsivas, el límbico, el responsable de la aparición de las emociones asociadas a cada una de las experiencias que se viven; y la neocorteza, que puede considerarse como la parte racional.
Y, la manera en que podemos conectar con estos tres aspectos, pasando la racionalidad para acceder a la impulsividad y las emociones, es con la inteligencia emocional. Esa es la capa del subconsciente que debemos convencer de que necesitan el producto o servicio que estamos mercadeando, ya sea con pautas o no. De ahí surge el storytelling igualmente. Persuasión.
5 claves para construir nuestra inteligencia emocional y aplicarla al marketing
El periodista Daniel Goleman introdujo la idea de inteligencia emocional. En su libro, Inteligencia emocional, identifica cinco áreas que contribuyen a la misma:
- Autoconocimiento: conoce la personalidad de tu marca, lo que ofreces y lo que la gente ya piensa de ti.
- Motivación: ¿Qué está tratando de lograr con su marketing? Sea honesto acerca de cómo quiere que la gente responda a su marketing.
- Empatía: ¿Cómo recibirá la gente su marketing? ¿Tiene sus intereses en mente o solo los suyos? ¿Sacan más de la transacción que tú?
- Autorregulación: ¿Puedes filtrar la falta de sinceridad, el interés propio y cualquier otra cosa que pueda molestar, ofender o interrumpir?
- Habilidades sociales: ¿Puedes comunicar tu mensaje de una manera reflexiva, auténtica y humana?
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